Ford relanza coupé que fue el equivalente europeo del Mustang.

El recordado Capri, desarrollado por la división europea de Ford y fabricado entre 1969 y 1986, reapareció hace unos meses en el Viejo Continente, pero únicamente con motor eléctrico y convertido en un SUV coupé.

Ford revivió hace poco al Capri con 2 opciones eléctricas: de 280 hp, con batería de 77 kWh y 620 km de autonomía y de 340 hp, con batería de 79 kWh, tracción en las 4 ruedas y autonomía de 592 km; pero, para ser un modelo más competitivo, tuvo lanzar rápidamente una versión más económica, con motor de 170 hp, tracción posterior, batería de 55 kWh y autonomía de 400 km, que tiene un valor alrededor de los 55 mil dólares.

Cuando apareció el Capri a inicios de 1969 tuvo la misión de ser el modelo equivalente al Mustang en Europa, por eso su forma de coupé deportivo. Rápidamente se convirtió en ícono de la marca y en un exitoso carro de competencias, llegando a vender casi 1,9 millones de unidades en sus 17 años de existencia, incluso el modelo también llegó a Estados Unidos, con la marca alternativa de Ford, Mercury.

El remake de 2024 utiliza la plataforma MEB del Grupo Volkswagen, que tiene una amplia colaboración con la marca estadounidense. Por fuera puede que tenga algo del estilo del clásico Capri, mientras que por dentro es absolutamente moderno.

En su interior, simple y digital, destaca una enorme tablet de 14,6 pulgadas para controlar la mayoría de funciones del carro, además del timón desde el cual también se activan varias funciones. En cuanto a seguridad, dispone de 12 sensores ultrasónicos, 5 cámaras y 3 radares para controlar un completo sistema de asistencias a la conducción.

Ford está rescatando los nombres de consagrados modelos, como Bronco y ahora Capri, y los dota de tecnologías actuales, para captar a clientes nostálgicos, pero que también quieren lo último en tecnología.